De pequeño, una película que marcó mi infancia fue BIG «Quisiera ser grande«, la sola idea de tener la posibilidad de ser adulto por un momento gracias a un deseo pedido a Zoltar, siempre vivirá presente en mis recuerdos más preciados.
En una de mis visitas a New York, tuve la suerte, y agradezco que fuera así, de conocer una juguetería que atesoraba algunas de las piezas utilizadas en esta mágica historia, y donde se filmó una escena especial de la película, la tienda de juguetes Fao Schuartz, que lamentablemente cerró sus puertas en julio del 2015 al público.
La juguetería Fao Schuartz
En este lugar, ubicado justo al lado del Apple Store de la quinta avenida, en el corazón de Manhattan, podías encontrar muchas pero muchas oportunidades para volver a ser niño.
El taller de confección de los muppets, los grandes legos, el piano de piso gigante que se utilizó para filmar la escena con Tom Hanks de la película, entre otros juguetes maravillosos. Recuerdo que en una zona de la tienda que podías seleccionar tus piezas y armar tu propio auto a control remoto y que podías vivir una aventura con cuentos relatados en vivo con efectos especiales y todo en la biblioteca de Petter Pan.
De la nada aparecía algún trabajador de la tienda para hacer magia a los niños y grandes, mas lejos los juguetes casi cobraban vida y el gran reloj que conducía al sótano era simplemente genial. La zona de dulces parecía un cuento hecho realidad, gomas, gusanos, no tenía fin. Pero no lo más sorprendente, era que en una esquina, solemne, se encontraba el famoso Zoltar, listo para cumplir un deseo.
En tiempos de fiestas, siento que la fantasía de éste lugar debe hacerle falta a mucha gente que ha perdido sus ganas de creer y soñar con fantasías, con historias irreales pero épicas.
Mis anotaciones
Como toda aventura que tiene magia, los que amamos los juguetes y creemos en ellos, tenemos la esperanza que abra nuevamente sus puertas, algunos dicen que podría ocurrir en el 2017 y su web lo anuncia en silencio, esperemos que se haga realidad.
No dejen de disfrutar sus viajes hasta en los más mínimos detalles pues la aventura que hoy vivas, nunca más volverá a ocurrir de la misma manera.